El viernes, 19/08/2016, participé en la XXXI Bajada Hondón-Aspe con una longitud de 11 Km. Lo primero a destacar es la cantidad de participantes, ya que nos congregamos más de 800 personas en la salida en el Hondón.
La verdad es que salí muy tranquilo, ya que llevaba unas semanas en las que no encontraba la forma y además hacía bastante calor, por lo que no quería cometer excesos. Sin embargo esto no era más que una percepción, ya que al contrastarlo con el crono iba marcando 5´15" - 5´20" en el paso de los kilómetros, incluso en el último kilómetro me atreví a acelerar. El recorrido era en su mayor parte asfalto (mejor o peor conservado) y aunque la mayor parte es en muy ligera bajada (practicamente llano), habían algunos repechos de diferentes distancias (especialmente el penúltimo a los 9 Km., y el último a los 10 Km.) en los que las piernas se resentían muchísimo.
Al final, bastante feliz por como me encontré durante la carrera y por el tiempo que hice,
58´37" (real), que me sorprendió.
En cuanto a la organización, pienso que se podría mejorar la zona de avituallamiento de meta ya que, con el alto número de participantes, se vio bastante colapsada y resultaba muy difícil obtener algún refrigerio. De agradecer que hubiesen dos zonas de avituallamiento durante la carrera ya que paliaron bastante el calor y bochorno que hacía.
El viernes, 19/08/2016, participé en la XXXI Bajada Hondón-Aspe con una longitud de 11 Km. Lo primero a destacar es la cantidad de participantes, ya que nos congregamos más de 800 personas en la salida en el Hondón. 
La verdad es que salí muy tranquilo, ya que llevaba unas semanas en las que no encontraba la forma y además hacía bastante calor, por lo que no quería cometer excesos. Sin embargo esto no era más que una percepción, ya que al contrastarlo con el crono iba marcando 5´15" - 5´20" en el paso de los kilómetros, incluso en el último kilómetro me atreví a acelerar. El recorrido era en su mayor parte asfalto (mejor o peor conservado) y aunque la mayor parte es en muy ligera bajada (practicamente llano), habían algunos repechos de diferentes distancias (especialmente el penúltimo a los 9 Km., y el último a los 10 Km.) en los que las piernas se resentían muchísimo. 
En cuanto a la organización, pienso que se podría mejorar la zona de avituallamiento de meta ya que, con el alto número de participantes, se vio bastante colapsada y resultaba muy difícil obtener algún refrigerio. De agradecer que hubiesen dos zonas de avituallamiento durante la carrera ya que paliaron bastante el calor y bochorno que hacía.
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